Capítulo 9
La luz llena
la habitación, me estiro y abro los ojos. Es una hermosa mañana de Mayo, a mi
lado, Jung Yunho está profundamente dormido, me sorprende que todavía este en
la cama. Está frente a mí y tengo una oportunidad sin precedentes para estudiarlo.
Su hermoso rostro parece más joven, relajado en el sueño. Sus esculpidos labios
están separados un poco y el lunar que tiene arriba de ellos le da un toque
sensual, su cabello es un desastre glorioso. Es tentador estirarse y tocarlo.
Me deslizo
de la cama, encuentro su camisa blanca y me la pongo. Camino a través de una
puerta pensando que podría ser el cuarto de baño, pero estoy en un inmenso
clóset lleno de trajes caros, zapatos, corbatas y camisas. ¿Cómo alguien puede
necesitar esta cantidad de ropa? En realidad, el armario de Junsu podría
competir con este. ¡Junsu! Oh mierda. No me acordé de él en ningún momento de
la noche, voy a estar en problemas.
Volviendo a
la habitación, Yunho sigue durmiendo. Intento con otra puerta y al fin encuentro
el baño. Me miro en el espejo y me doy cuenta que mi cabello está todo
desordenado, siento dolor en mi espalda baja, y mis músculos duelen un montón,
es como si nunca hubiese hecho ejercicio en mi vida. No has hecho ningún ejercicio en tu vida, mi subconsciente se ha
despertado. Me mira con los labios fruncidos dando golpecitos con el pie. Así que acabas de acostarte con Yunho, le
diste tu virginidad a un hombre que no te ama. De hecho, tiene ideas muy
extrañas acerca de ti y quiere convertirte en una especie de esclavo sexual y
perverso. ¡Estás loco, Kim Jaejoong!
Me
estremezco cuando vuelvo a mirarme en el espejo. Voy a tener que procesar todo
esto, sinceramente nunca pensé enamorarme del hombre más hermoso y rico de
Corea, y menos de uno que tenga un Salón Rojo del Dolor esperándome.
Salgo del
baño, tomo mi celular y mis audífonos, tengo 5 mensajes de Junsu. Le respondo
vagamente reportando que estoy vivo. Me dirijo a la cocina, es muy elegante y
moderna. Me toma unos minutos decidir que cocinar. Reviso en la nevera, hay un
montón de huevo, creo que panqueques y tocino estarán bien.
Estar
ocupado es bueno, me permite un poco de tiempo para pensar y la música a todo
volumen en mis oídos ayuda a no distraerme. He venido aquí a pasar la noche en
la cama de Yunho y lo he conseguido, sonrío en grande. Recuerdos de la noche
anterior llegan a mi mente, sus palabras, su cuerpo mientras me hace el amor…
cierro los ojos mientras un estremecimiento recorre mi cuerpo. Pongo el tocino
en la parrilla y mientras se cocina bato algunos huevos. Me giro y Yunho está
sentado en uno de los taburetes de la barra del mostrador del desayuno con su
rostro apoyado en sus manos. Todavía está vistiendo la camisa con la que durmió
y el cabello de “Acabo de follar” le queda muy bien. Me quedo paralizado y
ruborizado, al recobrarme me quito los auriculares.
-Buenos días
joven Kim, veo que está con mucha energía esta mañana –Dice secamente
-Dormí bien
–Tartamudeo mi explicación. Sus labios intentan disimular una sonrisa
-No puedo
imaginar por qué –Hace una pausa y frunce el ceño –Yo también
-¿Tienes
hambre?
-Mucha –Dice
con una mirada intensa y no creo que se esté refiriendo a la comida
-¿Panqueques,
huevos y tocino?
-Suena muy
bien
Termino de
cocinar mientras Yunho pone la mesa. Al terminar de cocinar me siento en el
taburete frente al y hago una ligera mueca de dolor cuando me siento
-¿Qué tan
dolorido estas? –Sus ojos se oscurecen
-Bueno, para
ser sincero no tengo con que comparar esto
-Quizás
deberíamos continuar con tu entrenamiento básico
-Oh –Lo miro
atónito mientras mis músculos se aprietan. Más sexo… sí.
-Come
Jaejoong –Ordena –Esto esta delicioso
Pruebo un
bocado del panqueque pero apenas puedo saborearlo. ¡Entrenamiento básico! Quiero follar tu boca. ¿Eso forma parte
del entrenamiento básico?
-Deja de
chupar tu labio, es muy distractor y resulta que sé que no estás usando nada
debajo de mi camisa, lo que lo hace aún más distractor
-¿Qué tipo
de entrenamiento tienes en mente? –Pregunto, mi voz suena ligeramente roca, lo
que hizo imposible el sonar natural y desinteresado.
-Bueno, como
aun te duele el trasero podríamos continuar con tus habilidades bucales.
Me ahogo con
mi té y lo observo con los ojos abiertos. Me palmea la espalda y me pasa un
poco de jugo de naranja.
-Eso si
quieres quedarte –Agrega. Levanto la mirada hacia él. Su expresión es ilegible,
es tan frustrante.
-Me gustaría
quedarme por hoy, pero necesito estar en mi casa en la tarde
-Bien, ahora
come tu desayuno Jaejoong, anoche no comiste nada.
-Realmente no tengo hambre –Susurro
-Realmente
me gustaría que terminaras tu desayuno
-¿Qué tienes
con la comida?
-Te lo dije,
tengo problemas con la comida desperdiciada. Come –Sus ojos están oscuros,
afligidos.
Recojo mi
tenedor lentamente y como todo hasta que termino mi desayuno. Yunho recoge su
plato y el mío.
-Tú
cocinaste, yo recojo. Después de que termine esto, tomaremos un baño.
-De acuerdo
–Mi celular suena, es Junsu
-Hola Junsu
–Le contesto
-Jae, ¿Por
qué no me mandaste algún mensaje anoche?
-Lo siento,
fui sobrepasado por los acontecimientos
-¿Estás
bien?
-Sí, no te
preocupes
-¿Lo
hicieron?
-Susu, no
hablaré de esto por teléfono –Yunho me mira
-Lo
hicieron… puedo notarlo -¿Eso es posible? Está fanfarroneando y no puedo
contarle nada porque firme un maldito acuerdo
-Junsu, por
favor
-¿Fue
cuidadoso?
-¡Junsu,
detente!
-Jae, no lo
ocultes de mí, he estado esperando este día por casi cuatro años.
-Te veré en
la tarde –Cuelgo.
Sera difícil
no contarle a Junsu, es tan tenaz y sé que no se detendrá hasta que le diga la verdad, pero no puedo decirle nada
porque tengo un CDC firmando. Necesito un plan
-¿El CDC
cubre todo? –Pregunto cautelosamente
-¿Por qué?
–Se gira y me mira
-Bueno,
tengo algunas preguntas sobre sexo y me gustaría preguntarle a Junsu
-Puedes
preguntarme a mí, Jaejoong
-Es solo
sobre aspectos prácticos, no mencionaré nada sobre el salón rojo del dolor
-¿Salón rojo
del dolor? Es más sobre placer, Jaejoong. Créeme –Contesta Yunho –Además tu
amigo esta con mi hermano, así que preferiría que no le dijeras nada.
-¿Tú familia
sabe sobre tu… preferencia?
-No. No es
asunto suyo ¿Cómo lo pasaste anoche? –Sus ojos me queman, está lleno de
curiosidad
-Bien
–murmuro
-Yo también
–Murmura –Nunca había tenido sexo vainilla antes –Mueve su pulgar a través de
mi labio inferior –Ven, vamos a darnos un baño –Se inclina y me besa. Mi
corazón da un brinco y siento un pinchazo en mi miembro.
La tina en
de piedra, blanca y profunda. Yunho se inclina y abre la llave para que se
llene, vierte un aceite de baño dentro del agua. Hace espuma mientras la tina
se llena, huele a jazmín. Se pone de pie y me observa, sus ojos oscurecidos,
luego se quita su camiseta y la arroja al suelo.
-Joven Kim
–Ofrece su mano
Estoy de pie
en la entrada con los ojos muy abiertos. Camino hacia adelante mientras admiro
su físico. Yunho es simplemente delicioso. Tomo su mano y entramos a la tina.
-Date la
vuelta, déjame ver tu rostro –Ordena, su voz es suave –Sé que tu labio es
delicioso, puedo dar fe de eso, pero ¿Podrías dejar de lamerlo? Me hace querer
follarte y estas dolorido.
Toma el
dobladillo de la camisa que estoy usando, la levanta por encima de mi cabeza y
la arroja al suelo. Se aleja para observarme, me sonrojo y agacho la cabeza.
-Oye –Me
llama. Le doy un vistazo y su cabeza está ladeada hacia un lado –Jaejoong, eres
muy hermoso. No agaches la cabeza como si estuvieras avergonzado de ti, no
tienes de que avergonzarte es un privilegio estar aquí y observarte –Toma mi
barbilla y levanta mi cabeza para mirarme a los ojos –Siéntate
Mientras lo
hago, Yunho se quita el pantalón de piyama y se sube detrás de mí. El agua
sube mientras él se sienta y me empuja hacia su pecho. Pone sus largas piernas
sobre las mías, sus rodillas dobladas, separa sus pies abriendo mis piernas.
Toma una
botella de jabón, vierte un poco en su mano, hace una poco de espuma y luego
pone sus manos alrededor de mi cuello y empieza a frotar el jabón por mi cuello
y hombros, masajeando con firmeza con sus largos y fuertes dedos. Gimo, sus
manos en mí se sienten bien.
Baja hasta
mis brazos y mi pecho, toca mis pezones e inhalo bruscamente, sus dedos los
rodean y los jalan suavemente, no dura
mucho tiempo y desliza sus manos a la altura de mi ombligo. Mi respiración
aumente y su creciente erección clavándoseme en el trasero no ayuda a que este
tranquilo.
Toma mi
erección y empieza a estimularme, mis manos descansan en sus firmes y
musculosos muslos y mi cadera se mueve encontrándose con el ritmo de su mano,
inclino la cabeza hacia atrás y gimo.
-Lo sientes,
Jae – Yunho susurra en mi oído y roza sus dientes en mi oreja
-Oh, por
favor –Susurro, tratando de endurecer mis piernas. No tengo control sobre mi
cuerpo, me tiene totalmente inmovilizado.
-Creo que ya
estás limpio –murmura y se detiene. ¿Qué
¡No!
-¿Por qué te
detienes? –Jadeo
-Porque
tengo otros planes para ti, Jaejoong. Gírate.
Me doy la
vuelta y lo encuentro con su erección en su mano. Mi boca se abre
-Quiero que
te familiarices con la más preciada y favorita parte de mi cuerpo. Estoy muy
unido a esto.
Es muy
grande, alzo la mirada y me encuentro cara a cara con su sonrisa maliciosa.
Está disfrutando mi expresión de asombro. ¿En verdad eso estuvo dentro de mí?
Yunho quiero que lo toque y eso me satisface mucho
Le sonrío y
alcanzo el jabón para el cuerpo, exprimiéndolo en mi mano. No alejo mis ojos de
los suyos. Mis labios están separados… muy deliberadamente, suavemente, muerdo
mi labio inferior y luego deslizo mi lengua por él, siguiendo el camino donde
estuvieron mis dientes. Sus ojos están serios, oscuros y se abren a medida que
mi lengua se desliza por mí labio inferior. Me acerco y rodeo su pene con una
de mis manos. Sus ojos se cierran brevemente, aprieto y Yunho pone su mano
sobre la mía.
-Así
–susurra y mueve su mano de arriba abajo con un firme agarre alrededor de mis
dedos, cierra sus ojos de nuevo y su aliento da tirones en su garganta. Cuando
vuelve abrirlos, su mirada es de un abrazador gris profundo. –Sigue así
Suelta mi
mano, dejándome para que continúe solo, y cierra sus ojos mientras muevo de
arriba hacia abajo toda su longitud. Mueve sus caderas contra mi mano e
instintivamente la muevo más rápido. Folla
mi boca… mmm. Lo recuerdo empujando su pulgar en mi boca, haciéndome
chuparlo. Su boca se abre ligeramente a medida que su respiración aumenta. Me
inclino hacia adelante, mientras él tiene sus ojos cerrados, pongo mis labios alrededor de él y
tentativamente chupo, deslizando mi lengua sobre la punta
-Ahhh… Jae
–Sus ojos se abren y chupo con más fuerza.
Mmmm… es
suave y duro a la vez, y sorprendentemente sabroso, salado y suave.
-Cristo
–Gime y cierra de nuevo sus ojos
Moviéndome
hacia abajo, lo empujo en mi boca. Gime
de nuevo, giro la lengua alrededor de la punta y Yunho flexiona sus caderas.
Sus ojos están abiertos y encendidos con el calor. Sus dientes están apretados
y vuelve a flexionar sus caderas. Estira el brazo, enreda sus dedos en mi
cabello y empieza a moverse
-Oh… Jae…
eso se siente muy bien –Murmura, Chupo aún más fuerte chasqueando mi lengua en
la cabeza de su impresionante erección, Envolviendo mis dientes detrás de mis
labios, sujetando mi boca alrededor de él. Gime desde lo más profundo de su
garganta. –Jae. ¿Qué tan profundo puedes? –Susurra
Lo meto más
profundo dentro de mi boca, lo puedo sentir en la parte posterior de mi
garganta y luego de nuevo en el frente. Mi lengua gira alrededor de la base. Es
como un helado con sabor a… Jung Yunho. Chupo más rápido y lo trato de meter lo
que más puedo dentro de mi boca
-Jaejoong,
voy a venirme en tu boca –El tono entrecortado en de advertencia –Si no quieres
que lo haga detente ahora. –Flexiona de nuevo sus caderas, sus ojos están
abiertos, cautelosos y llenos de obscena necesidad, necesidad de mí… Necesidad
de mi boca.
Sus manos
están tirando mi cabello. Puedo hacer esto, presiono con más fuerza y en un momento
de confianza, desnudo mis dientes. Esto lo lleva al límite. Gime fuerte y se
queda quieto y puedo sentir el cálido y salado líquido rebosando en mi
garganta. Trago rápidamente. Me siento y lo observo, una sonrisa de triunfo
está en mi cara. La respiración de Yunho es totalmente irregular, abre los ojos
y me mira.
-¿No tienes
nauseas? –Pregunta, asombrado –Dios, Jae… eso estuvo… genial, inesperado
–Frunce el ceño –Nunca dejas de sorprenderme
Sonrío y
conscientemente muerdo mi labio. Me mira de manera especulativa
-¿Has hecho
esto antes?
-No –Y no
puedo evitar el pequeño matiz de orgullo en mi negación
-Bien –Dice
complaciente y creo, aliviado –Entonces, otra novedad Joven Kim. Obtienes una A
en las habilidades orales. Ven, vamos a la cama, te debo un orgasmo.
Rápidamente
sale de la bañera, dándome la primera versión completa de su cuerpo. Envuelve
una toalla alrededor de su cintura. Saliendo de la tina, tomo su mano, me toma
en sus brazos y me besa con fuerza apretando su lengua en mi boca. Tengo muchos
deseos de girarme y abrazarlo… tocarlo… pero mis brazos están atrapados por los
suyos. Con el beso que me está dando tengo la sensación de que está expresando
su gratitud… quizás… ¿Por mi primera mamada?
Se aleja,
con las manos a cada lado de mi rostro, mirando fijamente mis ojos. Se ve
perdido.
-Di sí
–Susurra
-¿A qué?
–Frunzo el ceño sin entender
-A nuestro
acuerdo, a ser mío, por favor Jae –Susurra enfatizando al final, suplicando. Me
besa de nuevo, dulcemente, apasionadamente antes de que se aleje y se quede
mirándome. Toma mi mano y me lleva de regreso a su cuarto, dejándome
tembloroso.
En su cuarto
me mira mientras estamos de pie al lado de su cama.
-¿Confías en
mí? –Pregunta de repente. Asiento –Buen chico –Dice en un respiro, su pulgar
deslizándose por mi labio inferior. Se dirige a su armario y regresa con una
corbata de seda gris –Pon tus manos al frente.
Hago lo que
pide y une mis muñecas con su corbata, amarrándolas con firmeza. Sus ojos están
brillantes y salvajes, llenos de excitación. Tira del nudo, está asegurado.
¿Ahora qué? Mi pulso se ha ido por las nubes, el corazón me late a un ritmo
frenético.
Yunho se
mueve hacia el frente e instintivamente me muevo hacia atrás hasta que siento
la cama contra la parte de atrás de mis rodillas. Tiro de su toalla, pero no
puedo alejar mis ojos de su rostro. Su expresión es ardiente.
-Oh,
Jaejoong ¿qué te haré? –Susurra mientras me baja hacia la cama, acostándose a
mi lado y poniendo mis brazos sobre mi cabeza –Mantén tus manos aquí arriba, no
las muevas ¿entiendes? –Sus ojos arden en los míos y estoy sin aliento –Respóndeme
-No moveré
mis manos
-Buen chico –Murmura
y deliberadamente lame su labio lentamente –Te voy a besar por completo joven
Kim –dice suavemente y toma mi barbilla alzándola, dándole libre acceso a mi
cuello. Sus labios se deslizan por mi cuello besando, chupando y mordisqueando,
dándole total atención a la marca que tengo en él. Mi sangre caliente baja
hacia más allá de mi vientre, entre mis piernas. Gimo
Quiero
tocarlo. Muevo mis manos con bastante torpeza, dado que estoy restringido y
siento su cabello. Deja de besarme y alza la mirada hacia mí, agitando su
cabeza de un lado a otro, haciendo un sonido de desaprobación. Alcanza mis
manos y las pone de nuevo sobre mi cabeza.
-No muevas
tus manos –Me regaña suavemente
-Quiero
tocarte
-Lo sé –Murmura
–Mantén tus manos sobre tú cabeza –Exige, su voz es fuerte
Toma mi
barbilla de nuevo y empieza a besar mi cuello como antes. Es tan frustrante.
Besa y jala mis pezones con suavidad, mis caderas empiezan a balancearse y a
moverse bajo su propia voluntad, con el mismo que lleva mi boca en mí y estoy
tratando de recordar desesperadamente mantener mis manos sobre mi cabeza.
-Quédate
quieto –Advierte, su aliento se siente cálido sobre mi piel. Llegando a mi
ombligo mete su lengua de forma muy sensual. –Eres muy dulce, joven Kim –Su nariz
se desliza sobre la línea entre mi vientre y mi vello púbico, jugueteando con
su lengua. Se sienta de repente, se arrodilla a mis pies, tomando mis tobillos
y abriendo mis piernas.
Toma mi pie
izquierdo, dobla mi rodilla y lleva mi pie hasta su boca. Observando y
evaluando cada una de mis reacciones, besa con ternura cada uno de mis dedos y
luego muerde cada uno suavemente bajo las almohadillas. Cuando llega a mi dedo
pequeño, lo muerde con más fuerza y convulsiono, gimiendo. Desliza su lengua
por mi empeine. Besa mi tobillo y hace un sendero de besos desde mi pantorrilla
hasta más arriba de mi rodilla. Luego hace lo mismo con el pie derecho.
-Oh por
favor –Gimo cuando muerde mi dedo pequeño
-Cálmate
Esta vez no
se detiene en mi rodilla, sigue hasta el interior de mis muslos separando aún
más mis piernas mientras lo hace. Lame suavemente la longitud de mi miembro.
-Me gusta
esto –Susurra
-Oh, por
favor Yunho
-Mmm, me
gusta cuando me ruegas, Jaejoong
Gimo
-Ojo por ojo
no es mi estilo habitual, Joven Kim –Susurra, mientras sigue lamiendo mi
miembro –Pero me has complacido hoy y deberías ser premiado. –Escucho lo
maliciosa que suena su voz y mientras me pierdo en el placer que me proporciona
Yunho empieza lentamente a hacer círculos en la punta de mi pene mientras sus
manos sostienen mis muslos.
-¡Aahh! –gimo
mientras mi espalda se arquea
Da vueltas
con su lengua, una y otra vez, manteniendo la tortura. Estoy perdiendo todo
sentido de mí mismo. Mis piernas se ponen rígidas, Yunho desliza un dedo en mi
interior y escucho su gruñido.
-Oh, Jae. Me
encanta la forma en que tiemblas
Mueve su
dedo en círculos, estirándome, mientras su lengua intensifica su labor y gimo.
Es demasiado… mi cuerpo necesita liberarse. Lo dejo ir, perdiendo todo pensamiento
coherente mientras mi orgasmo se apodera de mí, retorciéndose en mi interior
una y otra vez.
Estoy
jadeando y vagamente escucho el sonido del empaque de un condón abriéndose. Lentamente se acomoda dentro de mí y empieza
a moverse. Oh… Dios. La sensación es dolorosa y dulce, fuerte y suave a la vez.
-¿Cómo se
siente esto? –Dice sin aliento
-Bien, muy
bien Yunho –Respondo y empieza a moverse en serio, rápido, fuerte y grande,
entrando y saliendo de mí una y otra vez, implacable, empujando dentro de mi
hasta que estoy de nuevo cerca del límite. Gimo
-Vente para
mí, Jae –Su voz es dura, áspera y cruda en mi oído. Exploto en medio de los dos
–Gracias… joder –Susurra, la mete duro una vez más y gime cuando llega a su
climax. Luego se queda quieto
Colapsando
sobre mí, siento todo su peso apretándome contra el colchón. Tiro mis manos
atadas sobre su cuello y lo sostengo lo mejor que puedo. Sé en este instante
que haría lo que fuese por este hombre. Soy suyo.
-¿Te das
cuenta que somos muy buenos juntos? –Murmura –Si te entregas a mí, será mucho
mejor. Créeme, Jaejoong, puedo llevarte a lugares que ni siquiera sabes que
existen – Sus palabras hacen eco en mis pensamientos. Rozo su nariz contra la
mía.
De repente,
nos damos cuenta de las voces que se escuchan en el pasillo. Me toma un momento
procesar lo que he escuchado
-Pero si todavía está en la cama
entonces debe estar enfermo. Nunca está en la cama a estas horas. Yunho nunca
se queda dormido
-Señora Jung por favor
-Kangin, no puedes alejarme de mi
hijo
-Señora Jung, él no está solo
-¿A qué te refieres con que no está
solo?
-Tiene a alguien con él
-Oh
Incluso yo
escucho la incredulidad en su voz
Yunho
parpadea rápidamente, mirándome, con los ojos muy abiertos y llenos de horror.
-Mierda, es
mi madre.
Gracias por el cap estaba esperando esta actualización, espero que no demores en actualizar
ResponderEliminargracias a ti nacio mi curiosodad de saber la historia real. Estoy facinada con los dos y mas por que tu adaptacion es un yunjae. Ahhhh que bonito. Gracias por la actu. Espero pronto la siguiente. Jejejeje te mado besotes
ResponderEliminarNo puede ser! Ya no hay más capítulos! Creo que colapsare si no leo la continuación!
ResponderEliminarLlevarlo a lugares insólitos... Desconocidos... Placenteros... Apuesto que si! Dios que hombre! Yunho tiene razón que bien se complementan, tal para cual!
Pero que hace su madre ahí? Y por que Yunho esta...preocupado?
Necesito la continuación! No quiero leer la original, se que es buena pero leer Yunjae es mi afición!
Mil gracias por la adaptación! Ojalá y se pudiera terminar! Harían sumamente feliz a esta Yunjae Shipper!