domingo, 5 de mayo de 2013

50 Sombras de Jung [Cap 4]



Capítulo 4



¡Bésame, maldita sea! Le suplicó, pero no me puedo mover. Estoy paralizado por una extraña y desconocida necesidad, completamente cautivado por él. Miro fijamente la exquisitamente esculpida boca de Jung Yunho, hipnotizado y él me devuelve la mirada, sus ojos oscurecidos. Respira con más fuerza de lo habitual y yo he dejado de respirar por completo. Estoy en tus brazos. Bésame, por favor. Cierra los ojos, respira profundamente y me ofrece una breve señal de negación con la cabeza, como si respondiera a mi silenciosa petición. Cuando abre los ojos de nuevo, lo hace con algún nuevo propósito, una firme resolución.

-Jaejoong, debes mantenerte lejos de mí. No soy el hombre adecuado para ti –Susurra. ¿Qué? ¿A qué viene eso? Ciertamente debería ser yo quien decida eso. Le frunzo el ceño y niego con la cabeza. –Respira, Jaejoong, respira. Voy a ponerte de pie y dejarte ir –dice en voz baja y me aleja con gentileza

La adrenalina se ha disparado a través de mi cuerpo, ya sea por el fallido atropellamiento o por la embriagadora proximidad de Yunho, dejándome ansioso y débil. ¡No! Grita mi mente cuando él se aleja, tiene sus manos sobre mis hombros, sosteniéndome  con sus brazos extendidos observando mis reacciones cuidadosamente. Y en lo único en lo que puedo pensar es en que quería ser besado, que lo hice malditamente obvio y él no lo hizo. No me quiere, realmente no me quiere.

-Lo tengo –respiro, encontrando mi voz –Gracias por salvarme –murmuro, inundado de humillación. ¿Cómo pude haber malinterpretado tanto la situación entre nosotros? Tengo que alejarme de él

-Ese idiota manejaba en sentido contrario. Me alegro de que yo estuviera aquí, sería horrible que te hubiera pasado algo ¿Quieres venir y sentarte en el Hotel un momento? –Me libera, sus manos a ambos lados de su cuerpo y yo estoy de pie frente a él sintiéndome como un tonto

Con una sacudida aclaro mi garganta. Simplemente quiero irme, todas mis esperanzas fueron destruidas ¿En qué estaba pensando? ¿Qué querría Jung Yunho conmigo? Mi subconsciente se burla de mí, envuelvo mis brazos a mí alrededor y me giro hacia la calle. Rápidamente la cruzo consciente de que Jung está detrás de mí, me volteo brevemente para hacerle frente pero no puedo mirarlo a los ojos.

-Gracias por el té y por hacer la sesión de fotos –murmuro

-Jaejoong… Yo… -Se detiene y la angustia en su voz reclama mi atención, por lo que contra mi voluntad me encuentro mirándole detenidamente. Sus ojos luces sombríos cuando se pasa una mano por el cabello. Se ve contrariado, frustrado, sus expresiones son crudas. Todo su cuidadoso control se ha evaporado.

-¿Qué, Yunho? –espeto con irritación después que él dice… nada. Solo quiero irme, tengo que llevarme mi frágil y herido orgullo y de alguna manera cuidar de él pare que sane

-Buena suerte con tus exámenes –murmura

-Gracias –no puedo ocultar el sarcasmo en mi voz –Adiós, Señor Jung –sin voltearme a verlo me dirijo al estacionamiento subterráneo

Una vez bajo el oscuro, frío concreto del estacionamiento con sus sombrías luces fluorescentes, me apoyo contra la pared y pongo la cabeza en mis manos. Espontaneas e indeseadas lágrimas llenan mis ojos. ¿Por qué estoy llorando? Me hundo en el suelo, enojado conmigo mismo por esta reacción sin sentido. Doblo mis rodillas, quiero hacerme tan pequeño como sea posible, quizás así este absurdo dolor sea menor mientras más pequeño me vuelva. Colocando la cabeza sobre mis rodillas dejo que las irracionales lágrimas caigan sin restricciones. Lloro por la pérdida de algo que nunca tuve, que ridículo. Estar en duelo por algo que nunca fue… mis frustrados sueños, esperanzas y mis deterioradas expectativas

Nunca había recibido un rechazo amoroso. Aunque nunca me he puesto a mi mismo en esta posición, jamás. Una vida de inseguridad: soy demasiado pálido, demasiado flacucho, demasiado desaliñado, descoordinado y una larga lista de defectos que continúan. He sido siempre el primero en rechazar a cualquiera que pudiera ser considerado como un admirador, nunca nadie ha despertado mi interés, nadie excepto el maldito Jung Yunho. Quizá debería ser más amable con la gente a la que le gusto, como HanByul o Changmin, aunque estoy seguro que ninguno de ellos ha sido encontrado sollozando a solas en lugares oscuros. Quizás todo lo que necesito es un buen llanto.

¡Detente! ¡Detente ahora! Mi subconsciente está gritándome metafóricamente, de brazos cruzados, apoyándose en una pierna y golpeando con su pie en señal de frustración. Sube al auto, ve a casa y continúa con tus estudios. Olvídate de él… ¡Ahora! Y detén toda esta mierda de regodearte en la autocompasión

Inhalo profundamente, me estabilizo y me levanto, mientras me dirijo al auto de Junsu seco mis lágrimas, no pensaré en él de nuevo. Puedo lidiar con este incidente como si fuera sólo una experiencia más y concentrarme en mis exámenes.

****************

Junsu está sentado en la mesa del comedor con su computador portátil cuando llego. Su sonrisa de bienvenida se desvanece en cuanto me ve

-Jae ¿Qué va mal?, has estado llorando… ¿Qué te hizo ese cabrón? –Gruñe y su rostro… Jesús, da miedo

-Nada Susu –En realidad ese es el problema. El pensamiento trae una sonrisa irónica a mi rostro.

-Entonces ¿por qué has estado llorando? Tú nunca lloras –dice, su voz suavizándose. Se pone de pie, sus ojos rebosantes de preocupación. Pone sus brazos a mí alrededor y me abraza. Necesito decirle algo para hacerlo retroceder

-Estuve a punto de ser golpeado por un ciclista, pero Yunho me salvó, quede muy conmocionado –Es lo único que pude decir

-No me sorprende ¿Cómo estuvo el café? Sé que lo odias

-Tome un té, estuvo bien, en realidad no tengo nada que contar. No sé por qué me lo pidió

-Le gustas, Jae

-Ya no, no voy a volver a verlo –Si, de hecho consigo hacerlo sonar como que no me importa

-¿De veras? –Mierda. Está intrigado. Me dirijo a la cocina para que no pueda ver mi rostro

-Si… el está alejado de mi nivel –Digo tan secamente como puedo –Es obvio

-No lo es para mí. De acuerdo, tiene más dinero que tú, pero entonces ¡También tiene más dinero que la mayoría de las personas en Asia! Por el amor de Dios ¿Cuántas veces tengo que decírtelo? Eres muy guapo

-Junsu, por favor. Tengo que estudiar –lo interrumpo

-¿Quieres ver el artículo? Ya está terminado, Changmin tomo muy buenas fotos

¿Necesito un recordatorio visual del hermoso Jung no-te-quiero Yunho?

-Claro –Conjuro una sonrisa en mi rostro y camino hasta la portátil. Y allí esta él, mirándome en blanco y negro, mirándome y encontrándome carente de algo

Pretendo leer el artículo, todo el tiempo encontrando su mirada gris, buscando en la fotografía alguna pista que me diga por qué no es el hombre adecuado para mí, según sus propias palabras. Y de pronto, salta a la vista. Es demasiado gloriosamente bien parecido. Somos opuestos y de dos mundos muy diferentes. Tengo una visión de mí mismo como un Ácaro volando demasiado cerca del sol, ardiendo y estrellándome como resultado. Sus palabras cobran sentido. No es adecuado para mí. Esto es lo que quería decir y hace que su rechazo sea más fácil de aceptar… casi. Puedo vivir con esto. Lo comprendo

-Muy buen trabajo, Junsu –me las arreglo para decir –Voy a estudiar –No voy a pensar en él de nuevo por ahora. Pienso y comienzo a estudiar

Es sólo cuando estoy acostado que le permito a mis pensamientos ir a la deriva. Volveré a lo de “no suelo salir con nadie” y me enfado por no haberlo recordado antes, cuando estaba en sus brazos suplicando mentalmente que me besara. El ya lo había dicho, no me quiere como novio. Ociosamente me pregunto si tal vez es célibe y se está reservando para alguien especial que claramente no soy yo. Me dejo llevar por los brazos de Morfeo

****************

Bajo mi lápiz, terminé mi examen. Siento una sonrisa extenderse en mi rostro, es la primera vez que  sonrío en toda la semana. Es viernes y celebraremos esta noche ¡Incluso podría emborracharme! Junsu aún está terminando su examen a cinco minutos para terminar. Eso es todo, nunca más tendré que volver a sentarme entre filas de ansiosos y aislados estudiantes.
Volvemos al departamento en el auto de Junsu negándonos a hablar del examen final.

-Jae, hay un paquete para ti –Junsu está de pie en los escalones sosteniendo un paquete marrón, que extraño, no he encargado nada. Junsu me da el paquete y toma mis llaves para abrir la puerta. El paquete está dirigido al “Joven Kim Jaejoong”, no tiene los datos de algún remitente –Ábrelo –Junsu está emocionado y se dirige a la cocina por el champán para celebrar que terminamos los exámenes

Abro el paquete y entro encuentro una cajita mediana de cuero que contiene tres libros, cubiertos con tela vieja y una tarjeta blanca escrita por un solo lado, con tinta negra y una clara letra cursiva, dice lo siguiente:


¿Por qué no me dijiste que había peligro? ¿Por qué no me advertiste?
Los jóvenes saben de lo que deben protegerse, ya que leen novelas en las que se les previene de estos trucos…


Reconozco la cita de Tess. Inspecciono los libros de cerca, tres volúmenes de Tess of the d’Urbervilles. Abro el libro, escrito en el frente con algún tipo de letra antigua, está lo siguiente:

“Londres: Jack R. Osgood, Mc Ilvaine &Co., 1981”

Santa mierda, son las primeras ediciones. Deben valer una fortuna y sé de inmediato quién las envía. Junsu está sobre mi hombro contemplando los libros y toma la tarjeta

-Primeras ediciones –susurro

-No –Los ojos de Junsu se amplían con incredulidad – ¿Jung? –Asiento con la cabeza – ¿Qué significa esta tarjeta?

-No tengo la menor idea. Creo que es una advertencia, honestamente, él continúa advirtiéndome. No tengo idea de por qué, no es como si estuviera golpeando a su puerta –frunzo el ceño

-Se que no quieres hablar de él Jae, pero de verdad está afectándote con o sin advertencias. Los libros deben costar una fortuna, ¿Qué intenta decir?

-no sé y no me importa. No puedo aceptar estos libros. Los enviaré de regreso con una cita igual de desconcertante de alguna parte oscura del libro

-¿La cita en la que Angel Clare dice “vete a la mierda”? –pregunta Junsu con el rostro completamente serio

-Sí, esa cita –Me rio, amo a Junsu, es tan leal y solidario. Embalo los libros y los dejo en la mesa del comedor. Junsu me da una copa de Champán

-Por el término de los exámenes, nuestra nueva vida y excelentes resultados –chocamos las copas y bebemos

*****************

El bar es ruidoso y agitado, lleno de próximos graduados dispuestos a emborracharse. Changmin se une a nosotros. No se graduará hasta el próximo año, pero está de ánimo festivo y nos apoya comprándonos una jarra de margarita. Mientras termino mi quinta, sé que esto no es una buena idea, principalmente por todo el champán que tome antes

-¿Y ahora qué, Jae? –Me grita Changmin por encima del ruido

-Nos mudaremos al nuevo departamento que los papas de Junsu le compraron

-Genial, tienes que volver para ver mi show

-Por supuesto, no me lo perdería por nada Minnie –Sonrío y él pone su brazo alrededor de mi cintura y me acerca a él

-Significa mucho para mí que estés allí, Jae –Susurra en mi oído – ¿Otra Margarita?

-Shim Changmin ¿estás tratando de emborracharme? Porque creo que está funcionando –suelto una risita –Creo que será mejor que tome una cerveza. Iré a buscarnos una jarra –Me libero del agarre de Changmin y me levanto de la mesa. Woah. La cabeza me da vueltas, tengo que afirmarme del respaldo de la silla para no caer, debería ir al baño.

Me tambaleo a través de la multitud. Por supuesto, hay fila, pero al menos está tranquilo y fresco en el pasillo. Tomo mi celular para matar el aburrimiento. Hmm… ¿A quién llamé la última vez? ¿A Changmin? Antes de ese hay un número que no reconozco. Ah, sí Jung. Me río tontamente, no tengo idea qué hora es, tal vez lo despierte. Quizás pueda decirme porque me envió los libros, si quiere que permanezca  alejado debería dejarme en paz. Contengo una sonrisa de borracho y presiono el botón de llamar. Responde al segundo timbre.

-¿Jaejoong? –Está sorprendido de escucharme

-¿Por qué me enviaste los libros? –Digo, pronunciando mal las palabras

-¿Jaejoong, estás bien? Tu voz suena extraña

-Yo no soy el extraño, tú lo eres –Creo que mi valor se alimenta a base de alcohol

-Jaejoong, ¿has estado bebiendo?

-¡¿Qué te importa?!

-Estoy… curioso. ¿Dónde estás?

-En un bar

-¿Cómo regresarás a casa?

-Encontraré una manera ¿Por qué me enviaste los libros? –Esta conversación no está saliendo como esperaba

-Jaejoong ¿dónde estás? Dímelo ahora –Su voz es tan controladora

-Eres tan dominante… -Suelto una risita tonta

-Jae, ayúdame con esto ¿En dónde diablos estas?

Jung Yunho maldiciendo en mi oído. Me río de nuevo

-Muy lejos de mi casa… Adiós Yunho

-¡Jae!

Cuelgo. ¡Ja! Aunque no me dijo nada de los libros. Frunzo el ceño, misión no cumplida. Estoy realmente borracho, mi cabeza está que explota mientras llego al primer puesto de la fila. Santa mierda ¿Acabo de llamar a Jung Yunho? Mierda. Mi teléfono suena y me hace saltar

-Hola –gimo tímidamente al teléfono. No había contado con esto

-Iré a recogerte –dice y cuelga. Solo Jung Yunho puede sonar tranquilo y amenazante al mismo tiempo

Santa mierda. ¿Vendrá a buscarme? Quizás está jugando conmigo, no le dije en donde estaba, es imposible que me encuentre. Y si de verdad  viene a buscarme ya nos habremos ido para cuando el llegue acá. Me lavo las manos y compruebo mi rostro en el espejo. Me veo ruborizado por el alcohol y ligeramente desenfocado. Voy a buscar la jarra de cerveza y regreso a la mesa

-Te fuiste por mucho tiempo –me regaña Junsu -¿Dónde estabas?

-En la fila para el baño

Changmin está charlando con EunKwang  pero hace una pausa para servirnos cerveza a todos y tomo un largo trago

-Susu, creo que será mejor que salga y tome un poco de aire fresco. Serán solo cinco minutos

Junsu asiente y yo me paro para abrirme paso entre la multitud otra vez. Estoy comenzando a sentir náuseas, mi cabeza está girando y no tengo mucho equilibrio. Tomar aire en el estacionamiento hace que me dé cuenta de cuan borracho estoy, creo que voy a vomitar

-Jae –Changmin ha llegado – ¿Estás bien?

-Creo que bebí demás –Le sonrío débilmente

-Yo también –Murmura, sus ojos mirándome intensamente, da un paso hacia mí y me sostiene en sus brazos. Intento alejarlo pero mi fuerza se vio reducida por el alcohol en mi cuerpo

-Changmin, ¿qué haces?

-Sabes que me gustas, Jae, por favor –Una de sus manos está en la parte baja de mi espalda apretándome contra él, la otra sobre mi mentón tirando de mi cabeza hacia atrás. Demonios… va a besarme.

 -No Changmin, detente, no quiero –Lo empujo, pero es una pared que no puedo mover

-Por favor Jae, bebe –susurra contra mis labios. Su aliento es suave y demasiado dulce por las margaritas y la cerveza. Con suavidad, traza un sendero de besos a lo largo de mi mandíbula hasta la comisura de mis labios

-Changmin, no- suplico. No quiero esto, es mi amigo y creo que voy a vomitar

-Creo que dijo que no –dice tranquilamente una voz en la oscuridad. ¡Santa mierda! Jung Yunho está aquí, ¿Cómo? Changmin me libera

-Jung –dice con sequedad. Miro ansiosamente a Yunho, él está mirando a Minnie con el ceño fruncido y está furioso. Mierda .Mi estómago da un tirón y me inclino hacia delante, mi cuerpo ya no es capaz de tolerar el alcohol y vomito espectacularmente sobre el suelo

-Ugh ¡Dios mío! Jae –Changmin salta hacia atrás asqueado. Jung me sostiene de la cintura y me conduce con cuidado a un jardín ubicado al borde del estacionamiento. Noto, con profunda gratitud, que está relativamente oscuro

-Si vas a vomitar otra vez, hazlo aquí. Yo te sostendré –Uno de sus brazos está alrededor de mi hombro y  su mano libre está sosteniendo el poco cabello que cae cerca de mi boca. Vomito y me dan muchas arcadas. En silencio prometo que jamás volveré a beber. Esto es simplemente horrible como para poder expresarlo en palabras. Finalmente, se detiene

Mis manos descansan en la pared de ladrillo que bordea el pequeño jardín, apenas sosteniéndome, vomitar es tan agotador. Jung retira sus manos y me ofrece un pañuelo. Mientras me limpio la boca no me atrevo a mirarlo, me gustaría que la tierra me tragara

Me arriesgo a darle un vistazo. Me está mirando fijamente, su rostro integro, sin dejar traslucir nada. Me doy la vuelta y veo a Changmin que luce avergonzado y, al igual que yo, intimidado por Yunho. Lo fulmino con la mirada

-Emm… nos vemos adentro Jae –murmura Changmin, pero ambos lo ignoramos y él se escabulle dentro del edificio dejándome solo con Jung

-Lo siento –murmuro

-¿Qué es lo que lamentas Jaejoong?

-La llamada telefónica principalmente, sentirme mal. Ah, la lista es interminable

-Todos hemos estado así, quizás no tan dramáticamente como tú –dice secamente –Se trata de conocer tus propios límites, Jaejoong. Quiero decir, estoy a favor de presionar hasta el límite, pero, de verdad esto es demasiado ¿Este tipo de comportamiento es un hábito en ti?

La cabeza me zumba por el exceso de alcohol y la irritación ¿Qué demonios tiene que ver esto con él? No lo invité aquí. Una parte de mí quiere decirle que si quiero emborracharme cada noche como lo hice hoy es mi decisión y no tiene nada que ver con él, pero no soy lo suficientemente valiente. No ahora que he vomitado frente a él. ¿Por qué sigue aquí?

-No –digo muy avergonzado

-Vamos, te llevaré a casa

-Tengo que decirle a Junsu

-Mi hermano puede decirle

-¿Qué?

-Yoochun, está hablando con él en este instante. Estaba conmigo cuando me llamaste

-¿De veras?

-Rastreé tu teléfono celular Jaejoong

Oh, por supuesto que lo hizo. ¿Cómo es posible? ¿Es legal? Acosador me susurra mi subconsciente, pero de alguna manera, porque se trata de él, no me molesta

-¿Trajiste alguna chaqueta?

-Sí. Yunho por favor, tengo que decirle a Junsu. Se preocupará –Su boca se aprieta en una línea dura y suspira pesadamente

-Está bien –Toma mi mano y me conduce hacia el bar. Me siento débil, todavía borracho, avergonzado, exhausto, mortificado y en algún extraño nivel extremadamente emocionado

Está muy ruidoso y aún más lleno de gente. Hay una gran multitud en la pista de baile, no veo a Junsu y Changmin está desaparecido. Eunkwang se ve perdido y desamparado estando solo

-¿Dónde está Junsu?

-Bailando –Dice Eunkwang, se escucha enojado.

Me pongo mi chaqueta negra y sigo buscando a Junsu

-Está en la pista de baile –Toco el brazo de Yunho, me inclino y le digo al oído, rozando su cabello con la nariz, oliendo su aroma limpio y fresco. Ay mi Dios. Todos esos sentimientos prohibidos y desconocidos que he intentado negar salen a la superficie y corren a través de mi agotado cuerpo. Me sonrojo y en algún lugar de mi vientre mis músculos se contraen deliciosamente

Recién ahora le tomo atención a lo que está usando. Lleva puesto; una camisa blanca holgada de lino, pantalones ajustados, zapatillas converse negras y una chaqueta oscura. Su camisa está desabrochada en la parte superior y no veo una pizca de pelo. En mi actual estado mental se ve delicioso.

Toma mi mano una vez más y me lleva hacia la pista de baile. Yo no bailo, puede sentir mi resistencia y logro ver una sonrisa divertida en su rostro. Le da un tirón a mi mano y estoy de nuevo en sus brazos. Comienza a moverse, llevándome con él. Caramba, sabe bailar y no puedo creer que este siguiéndolo paso a paso. Quizás es porque estoy borracho y puedo seguir el ritmo. Me aprieta con fuerza contra él, su cuerpo contra el mío… Es tan delicioso.

Nos mueve a través de la multitud hasta que llegamos al lado de Yoochun y Junsu. Se me corta la respiración. Junsu está haciendo sus movimientos. Baila moviendo su trasero, y eso solo lo hace cuando de verdad le gusto alguien.

Yunho se inclina y le dice algo a Yoochun al oído. Yoochun es alto y de hombros anchos, pelo oscuro y unos ojos perversamente brillantes. Yoochun sonríe y tira a Junsu a sus brazos, le habla al oído y Susu asiente con la cabeza, luego me sonríe y me dice adiós con la mano. Yunho nos saca de la pista lo más rápido que puede

No pude hablar con Junsu, se donde terminarán esos dos. Tendré que hacerle la charla del sexo seguro cuando volvamos a vernos. Hace tanto calor aquí, está demasiado ruidoso y brillante. Mi cabeza comienza a ir a la deriva, ay no…  puedo ver el suelo cada vez más cerca, acercándose peligrosamente hacia mi rostro. Antes de desmayarme alcanzo a escuchar una palabra salir de la boca de Yunho:

-Mierda



4 comentarios:

  1. Estaba tan emocionada leyendo que se me hizo corto u//u ...me gustooooo... !!!! *3* jajjaja morí imaginándome a junsu moviendo su trasero al bailar y jae "si mueve el trasero es porque en verdad le gustó alguien ..." xDDDDDDDDDD espero el 5to cap *o* <3

    ResponderEliminar
  2. Esto se pone emocionante W_____W QUIERO SEGUIR LEYENDO ESPERO CON EMOCION EL 5TO CAPITULO GRACIAS POR HACER VERSION YUNJAE DDE ESTE LIBRO W______W

    ResponderEliminar
  3. *Nueva lectora* ya leí la trilogía y me gusto. pero estoooooo!!!! me fascinaaaaaaa!!!!!!!! x Dios adicta. adicta total.

    ResponderEliminar
  4. Jajajajaja Jae me mato en este cap.... En serio es muy bueno! No puedo creer que lo ete finalizado! Me muero!
    Changmin resultara odioso en el fic lo se! Yunho fue tan lindo al sostener a Jae mientras vomitaba! Se escucha raro pero Changmin sólo dijo unas palabras y se alejó asqueado en cambio Yunho lo ayudo.....
    Así que habrá Yoosu!? Cuándo le diga a mi hermana va a saltar de alegría!

    ResponderEliminar